En el norte de Egipto
en la provincia de Sarqiya donde se encuentra el templo de la diosa Bastet, un
grupo de arqueólogo alemanes y egipcios descubrieron en el mes de octubre del
2013 una estatua con más de 3000 años de antigüedad perteneciente a Ramsés II quien fue un faraón de la dinastía XIX,
siendo un hallazgo de gran importancia para el patrimonio histórico egipcio.
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